ARROYO DEL FRESNO I.
Un interiorismo capaz de mejorar el estado de ánimo.
Proyecto de interiorismo.
Como ocurre casi siempre con las nuevas promociones, nuestros clientes tenían una vivienda recién estrenada en la que se encontraban fuera de lugar. A pesar de que habian elegido algunos acabados, la casa no tenía calidez ni personalidad.
Aunque no es lo habitual en estos casos, estaban dispuestos a hacer obras si eso posibilitaba una mejora y les ayudaba a sentirse más a gusto. Especialmente en la cocina, que resultaba para ellos la pieza más fría y desasosegante de todas.
Tenían algunos requerimientos específicos, como alojar a tres niños en un único dormitorio y crear una zona de homeworking que pudiese eventualmente transformarse en un cuarto en el que poder alojar visitas. En el salón, de dimensiones comedidas, necesitaban espacio para 5 personas, tanto en la zona de descanso como en la de comedor.
Propusimos un interiorismo elegante y cómodo, acorde con los deseos de nuestros clientes que tenían algunas piezas específicas ya fichadas. En el salón, propusimos un amueblamiento muy versátil que se acomoda no solo a la familia; también se adapta con pequeños cambios a las visitas, habituales en la familia.
Conseguimos un cuarto para los niños cómodo y funcional y mejoramos los baños con pequeños cambios en el mobiliario, espejos y accesorios.
En la cocina, cambiamos la puerta de posición y eso multiplicó el espacio disponible para almacenamiento y sobre todo, el orden, la proporción y la sensación de amplitud. Para ganar calidez, cambiamos las luminarias e incorporamos elementos cálidos en madera y tonos amarillos.
El cambio de la puerta en la cocina nos permitió incorporar al salón un aparador que hace las veces de vestíbulo, ya que la vivienda carece de un espacio de este tipo, tan interesante para dejar las llaves u otros objetos de uso cotidiano.